La Mosca en un día perfecto puede llegar a ser una pesadilla
Hoy los invitamos a leer, disfrutar y reír con la historia de Mosca.
El libro álbum de hoy nos narra que una mañana nuestra protagonista decide darse un baño. Se da un chapuzón en el agua tibia, tararea mientras disfruta su canción preferida, pero de pronto todo se oscurece, como si hubiera llegado la noche, con sonidos atronadores, similares a una tormenta.
De repente ve sobre ella “algo” grande, inmenso y de color marrón. ¿Será un meteorito?. La caída provoca olas gigantes, un remolino aspira todo… pero ella logra escapar.”
Finalmente nuestra amiga reflexiona y considera que bañarse resulta ser muy peligroso.
Con este gracioso cuento los invitamos a informarse sobre el baño de los niños.
¿Cada cuántos días hay que bañar a un niño?
Estas necesidades dependen de la edad, ya que según los años que tenga el niño, se ensuciará más o menos.
Esto también dependerá de los gustos y necesidades de los padres para que elijan el momento.
Cuando el niño empieza a gatear y a comer solo, es frecuente que se manche lo suficiente como para necesitar un baño diario; al igual de cuando ya caminan y son más independientes.
¿Es importante el baño solo por motivos higiénicos?
Como ya mencionamos anteriormente, la higiene es el aspecto fundamental en el desarrollo del niño, pero el baño es una buena oportunidad para favorecer la autonomía del niño.
Durante el primer año el niño tiene una actitud pasiva, siendo el adulto el encargado de esto.
Ya llegando el primer año los niños logran comprender lo que sucede y comenzará a practicar, para que ya a la llegada de los 2 años, con mayor autonomía, es necesario que los padres pasen a la fase más pasiva supervisando y el niño sea quien realice su higiene.
¿Se puede duchar a un niño?
En general los niños prefieren el baño en la tina al uso de la ducha.
Es más recomendable cuando el niño es algo más mayor y lo acepte de buena gana, cosa que suele
ocurrir cercano a los 4 años.
¿Cómo prevenir los accidentes en el baño?
Siempre es importante resaltar que el baño puede suponer un riesgo para que se produzca un accidente, pero no por eso se debe tener como un lugar prohibido para el niño, ya que en él suceden varios hitos de su desarrollo.
• Siempre comprobar la temperatura del agua antes de bañar al niño, para evitar quemaduras.
• Para prevenir caídas o resbalones se debe tener cuidado cuando el niño se pone de pie en la tina. Es recomendable colocar una superficie rugosa adherida en el suelo de la bañera, que haga que sea más difícil que los niños resbalen.
• Se evitará tener cerca de la bañera aparatos eléctricos que pudieran caer en ella para prevenir electrocuciones.
• Y lo más importante es recordar que en ningún momento se debe dejar al niño solo sin supervisión.
Los invitamos a conocer esta historia aquí
Actividades: Que el aprendizaje no pare al momento del baño
1. Figuras de Goma Eva
La goma eva es un material muy versátil y tiene la capacidad de pegarse en las superficies húmedas.
Mientras se baña podemos recortar figuras geométricas de colores, clasificar y armar diferentes figuras.
También se pueden armar rostros y hablar sobre las emociones. Las ideas pueden ser infinitas!
2. Cubitos de Hielo
Llena la hielera plástica con agua con colorantes alimenticios y Cuando tu hijo esté en su baño caliente, ofrécele uno para que juegue con él y así observe el causa-efecto de este juego.
El cubito de hielo se puede utilizar como un pequeño premio de días especiales.
3. Un Artista en la Tina
Una buena idea es crear pintura para la tina. Se necesita media taza del shampoo de tu pequeño, media taza de maizena, dos cucharadas de agua y colorantes comestibles. Así tu niño o niña podrá echar a volar su imaginación y tú acompañarlo en el proceso.
